Te compras un billete de ida y vuelta al otro lado del mundo y luego no te mueves. ¿A que no parece muy lógico? Lo lógico es que aproveches el vuelo transoceánico a Buenos Aires, Melbourne o Tokio para descubrir la región a fondo.
Ahí es donde entran en juego los bonos de vuelo o Air-Pass: billetes de avión que, por un precio único, permiten al turista viajar en avión dentro de un mismo país o un grupo de países cercanos ahorrándose hasta un 60% de lo que le costarían los trayectos domésticos por separado.
Son perfectos para recorrer países de gran extensión, como Estados Unidos, Australia o Brasil. Algunos, como el Visit Africa Pass cubren varios Estados dentro de un mismo continente, y otros como el Circle Trip Explorer o el Round The World Pass abarcan varios continentes o permiten incluso dar la vuelta al mundo. Casi todas las aerolíneas ofrecen este servicio para viajeros no residentes en el lugar de destino, y los grupos de aerolíneas como Star Alliance, One World y Sky Team tienen bonos conjuntos, como el African Pass o el Asia Fare, que permiten planificar rutas continentales con paradas en varias ciudades.
Los Air-Pass se venden solo fuera del país o el continente donde se van a utilizar. Otro requisito es que siempre se emiten en conexión con un vuelo internacional, aunque no necesariamente de la misma compañía. La mayoría requieren un mínimo de trayectos domésticos. Algunos sólo permiten una parada en cada ciudad, y en otros es obligado cerrar las reservas antes de viajar. En cualquier caso, hay que consultar las condiciones particulares de cada pase y valorar si conviene elegir este sistema u otro medio de transporte. Éstos son algunos de los que existen en el mercado. Se pueden adquirir en las oficinas de las líneas aéreas y a través de agencias de viaje, aunque algunas webs también permiten diseñar la ruta.
Sudamérica, del Caribe a la Patagonia
La compañía chilena LAN, lanzó hace tres meses el South American Airpass, que permite volar entre varias ciudades de Argentina, Chile, Ecuador y Perú pagando menos de la mitad de lo que costarían los trayectos sueltos. Entre los recorridos más atractivos está uno de cinco vuelos: de Lima a la isla de Pascua, de Pascua a Santiago de Chile, Santiago-Buenos Aires, Buenos Aires-Iguazú e Iguazú-Lima, por 874 euros en total. La oferta requiere comprar un vuelo intercontinental de LAN entre España y Sudamérica; un billete de ida y vuelta entre Madrid y Lima, por ejemplo, cuesta 758 euros, precio final.
El bono Visite Argentina se puede utilizar volando hasta allá con cualquier compañía, aunque los cupones salen más baratos si se hace con Aerolíneas Argentinas. El precio de los trayectos depende del número de cupones, desde un mínimo de tres (313 euros) hasta un máximo de 12 (826 euros), que se han de utilizar en un plazo de 90 días a partir del primer
El bono Visite Argentina se puede utilizar volando hasta allá con cualquier compañía, aunque los cupones salen más baratos si se hace con Aerolíneas Argentinas. El precio de los trayectos depende del número de cupones, desde un mínimo de tres (313 euros) hasta un máximo de 12 (826 euros), que se han de utilizar en un plazo de 90 días a partir del primer
¿África o los mares del Sur?
Veintisiete compañías aéreas, entre ellas la española Spanair, y una flota de más de 4.000 aviones permiten al grupo Star Alliance ofrecer un abanico rutas que abarca todo el mundo. El African Airpass, por ejemplo, sirve para viajar entre 30 aeropuertos de 24 países africanos en rutas de entre tres y 10 trayectos. Las Tarifas Círculo ofrecen itinerarios circulares por el norte de Asia, el Sureste Asiático y la región del Pacífico. Las rutas han de tener el mismo país de salida y de llegada, y un máximo de 16 tramos.
Por ejemplo: un billete de cinco tramos Bangkok (Tailandia)-Bali (Indonesa), Bali-Brisbane (Australia), Brisbane-Auckland (Nueva Zelanda), Auckland-Papeete (Polinesa Francesa), Papeete-Honolulú (EE UU) y Honolulú-Bangkok. En total, seis países y algunos de los lugares más atractivos de Asia y Oceanía, por 2.766 euros precio final. Como el número de combinaciones posibles es enorme, la web de Star Aliance incluye un calculador de itinerarios y tarifas. Basta señalar la región del mundo a la que se quiere viajar, el tipo de Air-Pass (regional, circular, vuelta al mundo…) y marcar los aeropuertos de las escalas.
El grupo One World, con doce aerolíneas, entre ellas Iberia y British Airways, enlaza 750 destinos, para los que ofrece dos tipos de tarifas Air-Pass: las multi-continentales, centradas en las regiones limítrofes con el Atlántico (Circle Atlantic) y el Pacifico (Circle Pacific), y las diseñadas para recorrer un solo continente (Visit Asia, Visit South America, Visit North America, Visit Japan…). Otra posibilidad es adquirir el Circle Trip Explorer, un billete diseñado para viajar por al menos tres continentes, pero sin completar la vuelta al mundo. La tarifa se establece en función del número de continentes por los que se pasa. Permite un máximo de 16 segmentos de vuelo para todo el viaje, que se ha de completar en tiempo mínimo de 10 días y máximo de 12 meses desde el primer vuelo.
Cómo dar la vuelta al mundo
Dar la vuelta al mundo puede salir por menos de 2.000 euros gracias a los billetes Round the World (RTW). Tanto One World como Sky Team y Star Alliance ofrecen estas tarifas en clase turista. En sus webs están los detalles de las compañías que las integran y las condiciones de sus tarifas RTW. Lo primero es esbozar una ruta, siempre en el mismo sentido, de este a oeste, o viceversa, y después, elegir la alianza más conveniente. Todas ellas establecen un número máximo de paradas. Una vez adquirido el billete, el itinerario no se puede cambiar (aunque sí las fechas y los horarios, a lo largo de un año a partir del primer vuelo). Iniciando el viaje en Londres (un billete cuesta unos 45-50 euros con una aerolínea de bajo coste) se puede apurar aun más el presupuesto. Agencias especializadas como Round the World Experts o Travelmood ofrecen bonos como el Budget Explorer, que cuesta 890 euros y contempla escalas en Los Ángeles (EE UU), las neozelandesas Auckland y Christchurch, Hong Kong (China) y vuelta a Londres.