¿Sabes que…?: está prohibido subir a la corona de la Estatua de la Libertad en Nueva York
Si bien antes era posible ascender a la corona de la Estatua de la Libertad, desde los ataques del 11-S ya no se permite en prevención a un ataque similar, en este caso a la famosa estatua de Nueva York.
Cuando el acceso a las visitas se renaudaron en 2004, tras estar cerrada al público desde el 11-S, ya solo se permite hacer una visita a su interior y subir al pedestal. Y si bien recientemente ha habido propuestas en el Congreso de los Estados Unidos para que se vuelva a permitir el acceso a la corona, en la actualidad se considera que cierre tiene tiempo indefinido.
Eso sí, aún podemos ver fotos realizadas por visitantes antes del 11-S de las vistas que se disfrutaban desde la corona.
ACTUALIZACIÓN
Desde el 4 de julio de 2009
es posible subir de nuevo a la Corona de la Estatua de la Libertad. En este enlace tienes la
información actualizada, incluido el acceso al sistema de reserva online previo
Una de las películas icono del cine del oeste es
Fort Apache, en la que se reunen dos mitos, el director John Ford y el actor John Wayne. Y gran parte de la película
Ford Apache fué rodada en el Monument Valley.
No deja de producir excitación darnos cuenta al llegar al Monument Valley y asomarnos al mirador que hay junto al Centro de Visitantes y el Hotel View que las más conocidas escenas de acción fueron rodadas justo al pié de dicho mirador. El paisaje que se nos presenta, con la específica situación de las famosas mesetas elevadas, nos trae al recuerdo dichas escenas, lo cual podemos posteriormente comprobar con un nuevo visionado de las mismas.
Eso sí, si bien la
película Fort Apache fué rodada en estos parajes fronterizos entre Utah y Arizona, los
verdaderos vestigios del Fort Apache se encuentran al sureste de Arizona, formando parte del
Centro y Museo de la Cultura Apache, recinto que se podemos visitar desde
Sedona o desde
Phoenix.
¿Sabes que…? La película “Entre Copas” fué rodada cerca de Santa Barbara
Viñedos en el Valle Santa Ynez de California en
Estados Unidos
¿Sabes que la película
“Entre Copas”, que popularizó los
vinos de California y los rutas turísticas para hacer degustaciones de vinos, fué rodada en
Valle Santa Ynez, muy cerca de la coqueta ciudad de
Santa Barbara, en California, Estados Unidos?
La película “Entre Copas” (título original, Sideways) dirigida por Alexander Payne e interpretada por Paul Giamatti, popularizó en nuestro país el concepto de hacer rutas turísticas para ir visitando bodegas para degustar vinos.
En la película, dos amigos hacían un viaje antes de la boda de uno de éllos durante el que visitaban distintas bodegas de
Valle Santa Ynez para degustar los famosos vinos de California.
Esta
zona vinícola y sus bodegas las puedes visitar durante tu
viaje a California. Lo encontrarás a 50 kilómetros hacia el interior de la pequeña ciudad costera de pequeña ciudad de
Santa Barbara. Los viñedos empezaron a ser plantados durante el siglo XVIII por los misioneros españoles que llegaron a California.
Que el
Death Valley de California, Valle de la Muerte, sea la zona desértica más inhóspita de
Estados Unidos, con temperaturas que superan los 50 grados, no ha sido históricamente impedimento para que en la misma se haya desarrollado un gran actividad por el hombre, en concreto, la apertura de cientos de minas en busca de todo tipo de valiosos minerales.
El Death Valley tampoco quedó aparte de las “fiebres del oro” que se desataron a finales del siglo XIX, principios del XX, en California. Pero, curiosamente, fué un carnicero vasco el que inició la Fiebre del Oro en el Valle de la Muerte.
Domingo Etcharren estaba buscando plata junto a un minero irlandés, cuando en diciembre de 1903 este último descubrió una gran veta de oro en la zona donde estaban trabajando, lo que desató la llegada de muchos más mineros en búsqueda del ansiado oro, pero solo en tres minas se extrajo realmente oro. Es resultado es que tras unos meses en que abrieron numerosas minas, al final hubo que abandonarlo todo.
Aparte de las minas abandonadas, una muestra actual de la
actividad minera desarrollada en el Death Valley en dicho periodo son los
“pueblos fantasmas” cuyos restos aún se pueden visitar, siendo el más destacado
Rhyolite, donde a principios del siglo XX llegaron a vivir 10.000 personas.
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